Si tuvieses que elegir entre una de las opciones que plantea el título…. ¿qué elegirías? Lo más probable, es que en este preciso momento estés diciéndote a ti mismo que ninguna de ellas.
Por absurdo que parezca, elegimos y decidimos hacer cosas mucho más absurdas en el día a día. Vamos a hablar de probabilidades para intentar arrojar una dosis de realidad a la propia realidad.
En un magnifico artículo anterior titulado “No dejes al azar lo que puedes realizar“de Barymont, el cual recomiendo releer, un compañero arrojaba el dato de un estudio realizado por la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) en 2015, que decía, que los españoles gastamos de media unos 450 € al año en juegos de azar. Es un dato significativo, pues una parte importante de un sueldo de un mes de un español se dedica a tentar a la suerte.
Pues bien, pongamos como ejemplo la mundialmente conocida Lotería de Navidad que se celebra cada 22 de diciembre en España.
En el bombo se introducen 100.000 bolas con los números que van desde el 00000 hasta el 99.999, esto quiere decir que si obtuviste un número tienes 1 probabilidad entre 100.000.
Si contaras con 50 números diferentes (poco probable para la mayoría de españoles), tendrías 50 probabilidades entre 100.000.
¿Cómo lo ves?: ¿probable o poco probable?
Sin embargo, la probabilidad de ser alcanzado por un rayo a lo largo de nuestra vida es de 1 entre 3.000.
La realidad es que si una persona invirtiese correctamente esos mismos recursos a lo largo de su vida, no necesitaríamos hablar de probabilidad sino de la certeza de que llegaría a conseguir un beneficio.
El problema es el desconocimiento y la mentalidad cortoplacista. Queremos el premio ya y a ser posible sin esfuerzo. Las personas depositan sus esperanzas de mejorar su calidad de vida, su situación personal y económica a un número al azar; esperando que la “diosa fortuna” se alíe con su boleto en vez de adquirir las riendas de su vida para hacer que las cosas sucedan.
Partamos de la base de que quien organiza una lotería siempre gana. De lo contrario no existiría la lotería. La “banca siempre gana”.
La Lotería Nacional reparte el 70% de lo recaudado en premios, y el otro 30% se queda en las arcas de loterías y apuestas del estado. En el caso de Euromillones es al 50%. Y sin contar aquellos números que siendo premiados no fueron vendidos, o que la combinación ganadora no la acertara nadie.
La mayor parte de las personas no recupera lo jugado. Muchos tienen que perder muchos pocos, para que muy pocos puedan ganar un poco mucho, si no, los números no cuadran.
Otra dosis de realidad con la que desgraciadamente todos convivimos en nuestro día a día, es la siguiente:
La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) presentó con motivo del día Mundial del Cáncer un dato sobrecogedor: 1 de cada 2 hombres (el 50%) y 1 de cada 3 mujeres (el 33%), desarrollará algún tipo de cáncer a lo largo de su vida.
Tenemos muchas más probabilidades de desarrollar una enfermedad grave, que de ganar la lotería. Sin embargo destinamos más dinero a juegos de azar que a protegernos correctamente a nosotros y a los nuestros ante dicha posibilidad.
Quiero pensar que es por desconocimiento y no por irresponsabilidad.
A modo informativo dejo una serie de probabilidades.
1- Acertar La primitiva (6 números) 1 entre 13,9 Millones
2- Acertar La Primitiva (6 números + Reintegro) 1 entre 139,8 Millones
3- Acertar Euromillones 1 entre 116,5 Millones
4- Sufrir ataque de tiburón 1 entre 3,7 Millones
5- Que nos alcance un rayo a lo largo de nuestra vida 1 entre 3.000
6- Que nos alcance un meteorito oscila entre 1 entre 3.000 y 1 entre 250.000 según artículo publicado por National Geographic con datos de EEUU.
Lo sensato es poner en marcha un Plan Financiero correcto, para tener la certeza de que, si se dan en tu vida cualquiera de esas probabilidades poco deseables, tengas la certeza de que económicamente, ni tú, ni los tuyos sufriréis las consecuencias.